Un nuevo estudio muestra que un inicio de la vida laboral inestable y precario en las personas jóvenes está relacionado con una peor salud mental futura. El trabajo ha sido realizado por investigadoras del Centro de Investigación en Salud Laboral (CISAL, un grupo mixto de la UPF y el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas). Amaya Ayala-Garcia, Laura Serra y Mònica Ubalde-López son las autoras del estudio, que ha sido publicado en la revista BMJ Open.

Desde los años 90, España se encuentra entre los países europeos con las tasas de empleo más bajas, las cuales se acentúan en la población activa joven. Además, en 2017, España tenía la mayor proporción de contratos temporales y una de las tasas más altas de precariedad. Estudios previos muestran que el desempleo, el empleo temporal y la inseguridad laboral están relacionados con una mayor incidencia de trastornos mentales.

En este estudio se evalúa la relación entre las distintas posibles trayectorias al inicio de la vida laboral con las futuras bajas por trastornos mentales en una muestra de personas trabajadoras asalariadas. El estudio de cohorte se basa en personas trabajadoras de entre 18 y 28 años, residentes Cataluña, que presentaron al menos un episodio de baja por trastornos mentales entre 2012 y 2014.

Las autoras observaron que las personas con una vida laboral más estable, por ejemplo una estabilidad laboral creciente, tendían a tener un futuro de acumulación de días por trastorno mental más favorable que las personas que tenían una vida laboral más inestable.

“Es un enfoque novedoso que evalúa cómo las transiciones entre tipos de contrato, situaciones de empleo/desempleo y periodos sin cobertura de la seguridad social, pueden afectar la evolución de la salud mental en la población trabajadora más joven que se incorpora al mercado laboral. Además, investiga el posible efecto de la propiedad -pública o privada- de las empresas en las que se ha llevado a cabo ese inicio de vida laboral”, explica Mònica Ubalde-López, coordinadora del trabajo y actualmente investigadora en el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), un centro impulsado por Fundación "la Caixa".

Amaya Ayala-Garcia, primera autora del artículo, comenta que “para evaluar la estabilidad laboral, aplicamos una técnica estadística que nos permitió hacer una primera foto de los 10 años de vida laboral previa, en la que identificamos cuatro patrones diferentes de participación en el mercado laboral”. Estos cuatro patrones son: un empleo permanente estable, una estabilidad creciente (disminución del número de transiciones entre contratos temporales y falta de cobertura de la seguridad social hacia contratos indefinidos), empleo inestable que varía entre tipos de contrato y, por último, un cuarto patrón caracterizado por una entrada al mercado de trabajo más tardía. “Para aproximarnos a la gravedad de los trastornos mentales, medimos los días acumulados de baja laboral por trastorno mental durante tres años. De este modo, detectamos una evolución más o menos favorable en el tiempo”, añade.

Observaron que haber trabajado en empresas grandes al inicio de la vida laboral se relacionó con una mejor salud mental posterior.

Las autoras del artículo observaron que las personas con una vida laboral más estable, por ejemplo una estabilidad laboral creciente, tendían a tener un futuro de acumulación de días por trastorno mental más favorable (menos días acumulados) que las personas que tenían una vida laboral más inestable. También observaron que haber trabajado en empresas grandes al inicio de la vida laboral se relacionó con una mejor salud mental posterior.

“Existe una precariedad laboral en la población joven que podemos ver en las tasas de temporalidad y paro que, además, han aumentado muchísimo con la COVID. Nuestros resultados muestran que un mercado laboral precario podría estar moldeando la futura salud mental en las poblaciones trabajadoras jóvenes. Por ello, las futuras políticas de salud pública deberían abordar este problema con el objetivo de prevenir las bajas a largo plazo.”, concluyen.

Artículo de referencia

Ayala-Garcia A, Serra L, Ubalde-Lopez M. Association between early working life patterns, in publicly and privately owned companies, and the course of future sickness absence due to mental disorders: a cohort study in Catalonia (Spain). BMJ Open 2021;11:e040480. doi: 10.1136/bmjopen-2020-040480.

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