El nuevo Servicio de Radiología Pediátrica del Hospital Infantil Vall d’Hebron tiene más espacio y es más seguro y amable para los niños y niñas. Además, se han incorporado aparatos de última tecnología que facilitan la tarea de los y las profesionales sanitarios y hacen menos estresante la estancia de los y las pacientes pediátricos. También se han unificado todos los tratamientos radiológicos en un único espacio, lo cual aumenta la seguridad y la eficacia del servicio. En este servicio se hace diagnóstico en pacientes pediátricos y también en la etapa fetal. Las técnicas de imagen son cada vez más avances y, como explica la Dra. Élida Vázquez, jefa del Servicio de Radiología Pediátrica de Vall d’Hebron, “las patologías en el pacientes pediátricos se manifiestan de forma diferente que en los adultos. Por este motivo, a Vall d’Hebron contamos con las herramientas de imagen diagnóstica más adecuadas”. Así en este servicio se realizan pruebas como ecografías, ecografías doppler, ortopantomografías, rayos X, resonancia magnética, tomografía computerizada, fluoroscopia y exploraciones con contraste... para hacer diagnóstico y seguimiento de patologías como el cáncer, patologías neurológicas, traumatismos o patologías pulmonares como las bronquiolitis o la gripe.

El Dr. Manel Escobar, Director Clínico del Institut de Diagnòstic per la Imatge de Vall d’Hebron, afirma que "en las nuevas instalaciones disponemos de equipación de última tecnología, tanto en lo referente a radiografía como a ecografía. Esto nos permite mejorar la resolución diagnóstica de los pacientes pediátricos. También es importante que está todo el servicio integrado en un solo espacio en el cual se da asistencia exclusiva a pacientes pediátricos. Además, en un entorno preparado para los niños y las niñas con una serie de elementos, como proyecciones de videos en las salas de telemando y radiografía, que mejoran su experiencia".

Hasta la puesta en marcha de esta modernización, algunas de las pruebas a las cuales tenían que ser sometidos los niños y niñas se realizaban en otros espacios y en algunos casos incluso tenían que trasladarse en otros edificios de Vall d’Hebron. Esto implicaba ciertos riesgos cuando se trataba de pacientes inmunodeprimidos o recién nacidos, por ejemplo, además de una peor eficiencia en la gestión del tiempo que suponía para el personal sanitario que tenía que acompañarlos y para los pacientes y sus familiares. "Ahora tenemos un servicio totalmente integrado dedicado exclusivamente a pacientes pediátricos, que no se cruzan con personas adultas, excepto sus acompañantes, y se evita la deambulación tanto de pacientes como de profesionales", explica la Dra. Élida Vázquez. Además, como todas las instalaciones del servicio se encuentran junto a las nuevas consultas externas pediátricas, los pacientes pueden hacer su recorrido habitual por el hospital (salas de pruebas de radiología y consultas) de una forma más integrada, óptima y segura para ellos y ellas. "Es muy importante, tanto para profesionales sanitarios como para pacientes, que no tengan que hacer desplazamientos. Ahora todo está muy cerca, la UCI pediátrica, rayos X, consultas externas, ecografías... Esto permite a los radiólogos pediátricos atender de manera rápida pruebas diferentes y a varios pacientes", añade.

La humanización del servicio se enmarca dentro del proceso que se está desarrollando en Vall d’Hebron para hacer un hospital más amable. Algunas de las pruebas que se hacen a Radiología Pediátrica implican cierto nivel de ansiedad para los niños y las niñas, puesto que tienen que estar en salas o con aparatos desconocidos para ellos y ellas y que hacen ruido o que los obligan a estar en posturas incómodas un buen rato. Ahora, las salas donde los pacientes pediátricos se hacen las pruebas están dotadas de sistemas de video y audio desde los cuales se proyectan imágenes de dibujos animados y videoclips musicales, a elección del paciente según su edad, que ejercen un efecto tranquilizador sobre niños y niñas. "Es el que se llama Ambiente Experience", dice Gemma González, coordinadora de Técnicos de Radiología Pediátrica, "y ayuda a rebajar la ansiedad y el estrés en los niños y las niñas". "Y a veces", añade la Dra. Élida Vázquez, "nos ha ayudado a evitar sedaciones, una cosa muy importante en pediatría, puesto que aunque estén muy controladas siempre suponen un riesgo y fan las pruebas más invasivas".

Una de las mejoras más destacables es la de las salas de ecografía. Ahora, el servicio cuenta con tres salas independientes, "cada una con su propio baño y los pacientes no se cruzan nunca. Tenemos aparatos de ecografía avanzada que nos permiten poner en práctica técnicas como el uso de contrastes ecográficos, que antes no podíamos hacer", señala la Dra. Élida Vázquez. Además, el servicio se ha distribuido en dos pasillos diferenciados que evita que pacientes ambulatorios y pacientes ingresados se crucen, previniendo posibles contagios.

Otra novedad importante es la nueva sala de telemando, en la cual se ha incorporado un nuevo equipo que usa una menor dosis de radiación que el resto de los aparatos que hay actualmente al mercado. "En pediatría, en cuanto a radiación tenemos un lema, Alara, que quiere decir que la radiación tiene que ser As Low As Reasonably Achievable (tan baja como sea posible). Por eso, si podemos sustituir una técnica que irradie por otra que no, como la ecografía o la resonancia, lo hacemos. Y cuando no es posible, usamos la menor radiación necesaria", dice la Dra. Élida Vázquez. El servicio también dispone ahora de un equipo de ortopantomografia, que permite hacer una radiografía completa de la zona maxilar, mandibular y dental. Hasta ahora, para hacer esta prueba los niños y las niñas tenían que desplazarse al Hospital General.

Pero no todo está en las máquinas. El servicio cuenta con personal muy especializado que, además, trabaja porque el entorno sea amable para niños y niñas. "Procuramos que sea un entorno Child Friendly, acogedor para pacientes y familiares", explica Gemma González. En este servicio trabajan profesionales de la medicina, de enfermería, técnicos y técnicas de diagnóstico por la imagen, celadoras y celadores.

También han mejorado las estaciones de trabajo de los y las profesionales, que cuentan ahora con nuevos ordenadores que los permiten trabajar de manera más rápida y eficiente. "Hay que tener en cuenta que trabajamos con imágenes y videos. Antes este proceso era un poco lento, pero ahora podemos ir mucho más rápido, por lo cual todos los procesos se han agilizado y se ha acortado el tiempo necesario para hacer una diagnosis", añade la Dr. Élida Vázquez.

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