La hipertensión es la causa de fallecimiento número uno en el mundo

El Dr. Fernando Martínez, internista en el Hospital Clínico de Valencia y miembro del Grupo de Investigación Cardiovascular y Renal de INCLIVA, colabora en un proyecto, cuya actividad inicial ha sido la publicación de un artículo de revisión para identificar estrategias claves para reducir el impacto de la hipertensión en las enfermedades cardiovasculares a nivel mundial. Según los expertos, la hipertensión arterial es la causa de fallecimiento número uno en el mundo, pero no está reconocida como tal.

El proyecto ha sido promovido por la prestigiosa revista internacional LANCET y fue presentado en Seúl durante el Congreso Mundial de Hipertensión Arterial.

A pesar de que sabemos cómo prevenir y tratar los niveles elevados de presión arterial, la hipertensión afecta al 30-40% de los adultos de todo el mundo. La comisión de Lancet, formada por especialistas en hipertensión arterial, procedentes de 19 países, afirma que la hipertensión sigue sin tener la consideración que merece porque no produce síntomas y falta un control adecuado.

Según Stuart Spencer, Editor Ejecutivo de “The Lancet “, el informe identifica varios temas sin resolver, cómo, por ejemplo, la falta de detección de la hipertensión arterial en los países en desarrollo mediante programas de screening y la falta de acceso al tratamiento farmacológico.

El informe va dirigido a promover nuevas formas de hacer frente a la hipertensión, tanto desde una perspectiva individual como de salud pública”.

El Dr. Martínez explica que “el artículo se ha realizado teniendo en cuenta el curso vital de los individuos, desde la etapa prenatal hasta la senectud”. Manifiesta que “el artículo no pretende ser otra guía clínica”. Las acciones clave identificadas, se han dividido en tres grandes bloques: prevención, diagnóstico-caracterización y tratamiento farmacológico, elaborando además un paquete técnico sobre como implementar las acciones a realizar, teniendo en cuenta la idiosincrasia de los distintos países y sistemas de salud”.

Como especialista, insiste en que se debe garantizar el acceso universal a dispositivos fiables de medida de presión arterial, usando protocolos estandarizados y con certificado de calidad. Asimismo, es importante que los pacientes participen activamente en el tratamiento y toma de decisiones y en que se debe identificar mejor a los pacientes de alto riesgo para optimizar su tratamiento. Por tanto, es importante formar tanto a los pacientes, como a los profesionales sanitarios vinculados a la hipertensión arterial, que deberían ser capaces de identificar las causas de hipertensión secundaria. Se debe garantizar el acceso universal a tratamientos antihipertensivos económicos incluyendo al menos un fármaco de los distintos grupos farmacológicos. Para conseguir este objetivo es importante la colaboración de todos los agentes implicados. Es además necesario realizar más investigaciones de cara a tratamientos más personalizados y rellenar las lagunas del conocimiento. Debido a la magnitud del problema de salud, es necesario la colaboración de distintos estamentos, incluyendo médicos, enfermeras, farmacéuticos y otros profesionales de salud, como dietistas.

Además, entre las acciones propuestas destacan “aquellas que inciden en la creación de un medio ambiente cardiosaludable y la implementación de estrategias socioeconómicas y políticas que promuevan la salud, incluyendo campañas universales de concienciación sobre las consecuencias que los malos hábitos de vida, apoyadas por el uso de las nuevas tecnologías”.

Añade que “no existe una priorización de las acciones, sino que son complementarias y que la posibilidad de llevarlas a cabo dependerá de las posibilidades económicas de cada país”.

Puntualiza que, “en muchos de los casos, las recomendaciones, no tienen una sólida evidencia científica, siendo los beneficios potenciales variables”.

Finalmente, el Dr. Martínez, como vocal de la Sociedad Valenciana de Hipertensión Arterial, invita a todos los profesionales de salud implicados a colaborar en este importante proyecto que puede contribuir de forma sustancial a la reducción de la morbi-mortalidad relacionada con las enfermedades cardiovasculares.